Wrap up #10

Me parece que este año tengo un parón lector bastante importante porque, a lo largo de los seis meses que han transcurrido, solo he conseguido leer tres de los libros que estaban en mi TBR. Espero poder compensar la falta de lectura en lo que queda del 2018, ya que son muchas las novelas que tengo ganas de leer.

Por orden de lectura, los tres libros son:

1. Matar a un Ruiseñor de Harper Lee.

Scout Finch espera con impaciencia la llegada del verano, pues es la época en la que puede disfrutar jugando sin descanso y en la que tanto ella como su hermano mayor tienen más tiempo para desentrañar el misterio que hay detrás de su vecino "Boo" Radley. Su gran imaginación les permite inventar historias sobre el asunto e incluso llegan a creer verle. Sin embargo, toda su fantasía se detiene en el preciso momento en el que Atticus, su padre, acepta defender a Tom Robinson, un hombre de raza negra que ha sido acusado de violar a una mujer blanca llamada Mayella. Dada la condición del caso, muchos no aprueban la decisión del abogado y los niños de la escuela no tardan en burlarse de los hermanos Finch. Pero la actitud de Atticus es firme y está dispuesto a hacer lo que está en su mano para averiguar lo que ocurrió y que Tom tenga un juicio justo, sin que su color de piel interfiera en absoluto. En esta novela, Harper Lee hace un retrato de la sociedad sureña estadounidense y nos plantea el tema de la cuestión racial, la forma en la que los negros eran apartados y considerados inferiores. También nos habla del sistema judicial, de la compasión y el respeto, sobre la figuras del hombre y la mujer y del impacto de la realidad sobre la inocencia de los niños. Es un libro muy atmosférico, que puede resultar lento al principio, pero que da un giro espectacular de acontecimientos y ya no puedes para de leer. Además, el personaje de Atticus es extraordinario, con una profundidad y unos matices que no dejan indiferente a nadie. Adoré el libro de principio a fin y es imprescindible que todo el mundo lo lea. 

2. Una Vacante Imprevista de J. K. Rowling.
El apacible pueblo de Pagford recibe una sacudida al morir Barry Fairbrother, un bondadoso vecino que trataba de ayudar a todo el mundo. No obstante, su repentina defunción ha dejado una vacante en el consejo parroquial y las campañas para hacerse con él no tardan en despertar. Cada familia tiene sus propios secretos y si no van con cuidado, éstos pueden salir a la luz de la forma menos deseada. ¿Qué tan felices son los habitantes de esta pequeña comunidad? A través de los diferentes núcleos familiares que componen esta historia, J. K. Rowling habla sobre el acoso escolar, la desdicha dentro del matrimonio, de los problemas por los que puede pasar un adolescente y de la violencia doméstica. Analiza con suma profundidad cada uno de los temas y lo hace con crudeza, sin esconderse tras eufemismos, mostrando la realidad tal cual es. Es una novela chocante, con momentos difíciles de sobrellevar y que impacta. No voy a detenerme más en este libro, pues tenéis la reseña disponible en el blog. Sin duda, Una vacante imprevista es muy recomendable.

3. Frankenstein de Mary Shelley.
Victor Frankenstein siempre ha sido un joven inteligente y audaz, capaz de asimilar conocimientos con suma rapidez y muy entregado a su área de estudio. La ciencia le permite entender mejor el mundo y la comunidad pronto le augura un futuro prometedor. Sin embargo, su afán por experimentar y alcanzar mayores niveles de sabiduría le llevan a cometer un acto cuyas consecuencias son catastróficas. Obsesionado con la vida y la muerte, el intrépido científico se pasa horas en su laboratorio intentando desvelar los misterios del ser humano y, tras varios errores, consigue insuflar vida a un cuerpo que él mismo ha construido. Entonces, empieza la desgracia. Un novela escrita de forma magistral, con unos personajes bien desarrollados y un ambiente muy acorde con la historia que narra. La autora trata aspectos tan revolucionarios para la época como la moral dentro de la ciencia, el deseo de desentrañar los misterios del ser humano, así como la idea de querer jugar a ser Dios. Por lo que respecta a mi opinión, a pesar de la calidad de la obra, no conseguí adentrarme dentro de la trama y no me traspasó. Supongo que las expectativas me pasaron factura y no pude disfrutar de la brillante historia que nos presenta Mary Shelley. Cuando lo terminé, lo único que sentí fue confusión, no pudiendo determinar si me había gustado o no. Tristemente, tras mucho reflexionar, me di cuenta de que el libro no me produjo emoción alguna. Repito que el libro es una joya, pero no me gustó.

Estas son mis ideas acerca de los libros leídos en el primer semestre del año. ¿Habéis leído alguno de ellos? Cualquier cosa que me queráis decir, los comentarios son bien recibidos.